Este Honorable Directorio de la Caja de Previsión y Seguridad Social de Abogados y Procuradores de Tucumán se dirige a los afiliados y miembros activos y pasivos y letrados en general, que participan de las distintas formas en las que se estructura la abogacía organizada, a efectos de manifestar algunas consideraciones en relación a los hechos acaecidos en el seno del Colegio de Abogados de la Capital y a las publicaciones efectuadas con respecto a los mismos.
En primer lugar, reiterar que este Directorio promovió desde siempre el respeto a las formas pertinentes que deben observarse en los órganos colegiados así como el cumplimiento efectivo del debido proceso que debe guardarse como norma base de funcionamiento de los mismos. Todo ello en un clima de armonía, consenso y respeto a la diversidad y distintas creencias. Este respeto se traduce en nuestras publicaciones, que se limitan a dar a conocer nuestros actos de gestión e información útil para los afiliados.
Esta Caja de Previsión es totalmente ajena a los hechos atribuidos por el Presidente del Colegio de Abogados de Tucumán a esta institución, como presunta generadora de un conflicto absolutamente interno de dicho Colegio, de sus representantes y/o de su política y gestión, que es totalmente autónoma y ajena a esta Caja; por lo que consideramos totalmente desafortunada la publicación del Colegio de Abogados de Tucumán de fecha 11/02/2022 en referencia a los bochornosos sucesos acaecidos en su ámbito.
Asimismo, resulta lamentable observar la degradación del discurso institucional de la máxima autoridad de una institución hermana como lo es el Colegio de Abogados de la Capital, en cuanto a que debe recurrir a encontrar culpables permanentemente para justificar el, cada vez mas grande, universo de críticas, que se yergue sobre su accionar.
Nos solidarizamos con nuestro afiliado y Vicepresidente de la hermana institución, Carlos Casal, por la violencia institucional que sufriera y sobre la cual pende aún resolución judicial y con todos los letrados víctimas de discriminación y persecución política e ideológica por las políticas sectarias, violentas y excluyentes que impulsa la Presidencia del Colegio de Abogados de la Capital sobre todos los que no son obsecuentes.
Es nuestro deber seguir insistiendo en que el debido proceso debe ser respetado, las formas adecuadas de comunicación reestablecidas y las garantías democráticas para disentir y expresarse libremente, garantidas.
Exhortamos nuevamente al Presidente del Colegio de Abogados a ceñirse a los valores democráticos que tanto orgullo supieron darnos a los colegiados y a cesar en las permanentes manifestaciones desestabilizadoras e imputaciones demagógicas en contra de nuestra institución.
